La personalidad del artista y su obra: Salvador Dalí
El pintor y
escultor catalán Salvador Felipe Jacinto Dali i Domènech fue entre muchos, uno de los representantes más
reconocidos y destacados del surrealismo. Este al igual que todos, tenía una
personalidad única y diferente que le hacía destacar de entre los demás artistas.
Los rasgos de la
personalidad de un artista, se rigen en base a sus experiencias pasadas. En el
caso de Dalí, su personalidad se empezó a forjar debido al fallecimiento de su
hermano primogénito. Salvador al asumir el rol de su hermano muerto, no se manifestó
como era el, sino que interpreto un papel de cara exterior que lo ayudo a afrontar
su baja autoestima y a sus medos internos.
Salvador Dalí siempre
estaba en búsqueda del reconocimiento y la aprobación de los demás. Aunque en ocasiones
parecía que no le importase lo que los demás piensen o digan de él, Dalí era
muy inseguro de sí mismo, y para ocultar esto intentaba “llamar la atención”. Se dice también que Salvador tenía una postura
individualista, ya que le gustaba trabajar libre y sin restricciones, pero si
se lo contradecía, tomaba
actitudes impulsivas que le servían
como coraza para resguardar sus miedos internos.
Como varios artistas
la sensibilidad de Dalí se veía plasmada en sus obras.
Salvador Dalí
había mantenido una imagen falsa (de si mismo) por toda su vida para protegerse
de quien era en realidad, ya que no quería defraudar a nadie por el episodio ocurrió
con su hermano y las expectativas de sus padres tenían de él; y mostraba su
verdadero ser a través de sus obras a causa de que en persona, Dalí se mostraba
como los demás lo querían ver.
Esta dualidad
presente a lo largo de su vida, lo ínsito a indagar la explicación de su origen
e identidad, con el fin de sentirse vivo, autentico, original, ridículo y
extravagante, con la intención de ser quien de verdad es.
Es por eso
que Dalí en sus obras trata la interpretación de los sueños. Ya que este al ser
diferente y fuera de lo común, lo ayudaban a expresar su mundo interno y lo que
yacía dentro de su cabeza (sus miedos, pensamientos, ideas, etc.).
la precencia de la memoria 1931
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